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Crónicas helénicas
El pasado 26 de Octubre se celebró en Bruselas la Cumbre Europea cuyos asuntos principales fueron la quita de la deuda griega, la recapitalización de la banca y la ampliación del fondo europeo de estabilidad financiera. Las negociaciones con las autoridades económicas sobre el problema heleno duraron más o menos unas ocho horas cuando se halló una solución de compromiso que contemplaba que los bonos griegos en dotación de los bancos acreedores perdiesen el 50% de su valor. De consecuencia, las instituciones crediticias aceptaron el impago de unos cien millones de euros sólo en cambio de un acuerdo de recapitalización del sector. Además, por efecto de la situación financiera muy delicada de muchos Países de la eurozona, se ha decidido el aumento de los recursos del fondo de rescate que corresponden a un billón de euros. Durante la jornada de ayer el Primer Ministro griego Georgios Papandreou anunció que se realizará un referéndum sobre “el pacto de la quita”, algo que no ha recibido la aprobación de Merkel, Sarkozy y muchos otros líderes europeos. A raíz de la decisión de la máxima autoridad del gobierno heleno las principales Bolsas cayeron en picado. La eventualidad de que el pueblo no ratifique lo establecido en la cumbre europea llevaría a Atenas a declarar la bancarrota que, supuestamente, generaría un efecto dominó en todo el continente.
El 28 de Octubre se celebró en Grecia la jornada de las Fuerzas Armadas con el respectivo desfile militar en todos los principales centros urbanos del País. En Tesalónica, este evento fue anulado porque los manifestantes ocuparon el palco de las autoridades antes de que llegasen las fuerzas de seguridad. El Presidente de la República, Károlos Papoulias que tenía que pronunciar un discurso, tuvo que irse de la segunda ciudad del Estado heleno quejándose de que la gente le tachara de “traidor“. El Ministro de Defensa, Panos Beglitis, habló con los militares sobre este episodio asombrándose de que no hiciesen nada para normalizar la situación. En Atenas y en los centros más periféricos tuvieron lugar insultos y agresiones contra los representantes de las instituciones.
Las protestas se realizaron también en los estadios de fútbol durante la jornada del domingo. A los policías se les ordenó revisar todo tipo de pancarta y quitar las con contenido político o discriminatorio. Sin embargo, dentro de las canchas de toda Grecia aparecieron muchos lemas contra el gobierno y la actual situación del País y el desarrollo de los partidos fue llevado a cabo regularmente.
Tras estos sucesos tomó la palabra el Ministro de Finanzas Evangelos Venizelos que afirmó que la gente reacciona de forma equivocada y por objetivos equivocados. Además estigmatizó el hecho de que hasta los niños se utilizasen como “arma de presión sindical”. Luego, añadió que si los profesores y, en líneas generales, la sociedad no aprenden a respetar a los menores cada reforma educativa es inútil y todo debería empezar desde cero”. A ver si usted también, Sr. Ministro, da el ejemplo….